miércoles, 6 de junio de 2012


LA LECTURA
 FACTORES Y ACTIVIDADES QUE ENRIQUECEN EL PROCESO      
                                                                                
Introducción


La búsqueda de estrategias para hacer
de la lectura un verdadero proyecto
de iniciación en la adquisición de
conocimientos ha sido una constante
de las personas que intentan, a través
d e   l a   i n v e s t i g a c i ó n ,   e n c o n t r a r
s o l u c i o n e s   p a r a   m e j o r a r   l a s
debilidades que presentan los estudiantes. Se incursiona,
se ensaya con nuevos métodos con el fin de encontrar
uno que sea el más efectivo para el aprendizaje de la
lectura. Se intenta cada vez cuestionar la aplicación de
los métodos tradicionales y plantear unos cambios de esas
viejas concepciones de la lectura y del proceso de
aprendizaje en general.
El proceso de aprendizaje de la lectura debe
inscribirse dentro de un concepto y un proceso más amplio
donde se tome en cuenta la personalidad del niño y de la
niña cuando se inician en ese proceso, donde el ambiente
escolar estimule el proceso, donde los errores iniciales
den margen para corregir con suavidad y tacto los
desaciertos, donde la actividad de los estudiantes sea el
eje principal de la labor educativa, porque son ellos
quienes construyen el conocimiento con base en sus
experiencias y de las interacciones que les propicia el
medio familiar y social. El proceso de aprendizaje ubicado
desde esta perspectiva, abierta y dinámica, coloca al sujeto
como un ser activo con plena libertad para buscar
soluciones a las interrogantes que le plantea ese proceso
y con esa búsqueda ir transformando su pensamiento y
alimentando su mundo interior.
En ese sentido, el alumno se convierte en un ser que
piensa, actúa, crea y expresa todo lo que siente. En ese
grado de libertad, el niño y la niña van corrigiendo sus
desaciertos con seguridad y paso firme, para adentrarse en
el complejo mundo del conocimiento. Con todo ese
aprendizaje significativo –tal vez incipiente, pero propioaprende a leer el entorno, a cuidarlo, a sentirlo suyo, porque
lo considera verdaderamente interesante y productivo. El
aprendizaje desde este punto de vista, es un proceso
continuo que no se sabe a ciencia cierta  cuándo comienza
porque cada momento proporciona un aprendizaje nuevo
que permite reciclar o transformar el anterior y penetrar en
la psiquis del aprendiente hasta que logre otro aprendizaje.
El aprendizaje de la lectura, bien orientado, debe
permitirle al estudiante el manejo de herramientas para
un desarrollo autónomo, personal, placentero, porque le
da el poder de crear en forma permanente, porque le
permite decidir qué es lo que necesita aprender –basado en sus
inquietudes, necesidades, interés, edad, otros-, en qué
momento y  en  cuá l e s   c i r cuns t anc i a s   adqui r i r   e s e
conocimiento.
La interacción entre la lectura
y la escritura
E n   l a   l e c t u r a   y   l a   e s c r i t u r a   c omo   p r o c e s o s
interactivos Robledo y Rodríguez (1998: 15) acotan lo
siguiente:
Los investigadores preocupados no han escatimado
esfuerzos en la búsqueda de alternativas que permitan
comprender mejor estos dos procesos y la forma cómo el
hombre –la mujer- interactúa con el medio que lo rodea.
P o r   e s t e  mo t i v o ,   e l   l e c t o r   s e   c o n v i e r t e   e n   s u j e t o
participante que entabla una interacción con el texto
mediante sus conocimientos previos, en primer lugar,
luego con el esquema que maneja para abordar esa lectura
para luego poder construir el sentido que el escritor quiso
darle en el momento de plasmarlo. Ese protagonismo del
autor se traslada al lector como una forma de intercambio
de ideas entre autor y lector. En esa comunión el lector
puede reproducir de una manera creativa, con su escritura
personal, la parte comprendida de la lectura.
La lectura
La lectura es un proceso en el cual el lector comparte
o no lo plasmado por el escritor, por este motivo una
página agradable le permite a quien la lee, viajar, soñar,
alimentar sus fantasías, enterarse de cosas que le permiten
modificar o mantener las ideas que anteriormente tenía
aprehendidas. En ese sentido, la lectura es el más poderoso
de los medios para adquirir información. La lectura es
también un proceso en el cual el lector con toda su
experiencia previa va transformando y reconstruyendo
el texto que lee para incorporarlo a su realidad.
La lectura es a su vez un acto de comunicación,
donde lector y escritor entablan una conversación virtual
que propicia estados internos en la persona que lee. Con
esa lectura llega a experimentar variadas emociones, a
confrontar sus puntos de vista, a compartir con otros las
ideas y, por qué no, a sentir un placer estético. Es una
forma efectiva de acercarse al conocimiento y a la
información, con ella se conocen lugares, se describen
las personas, los objetos u otros con lujo de detalles, se
narran los acontecimientos y las situaciones; es posible,
a su vez, conocer el funcionamiento de un sistema, de un
organismo, de una estructura, las ambiciones que encierra 
un proyecto, los objetivos que persigue, su misión, su
visión, entre otros. La lectura da la posibilidad de conocer
y disfrutar el mundo (Charría de Alonso y González
Gómez, 1993: 11-15).
De sde   e s a  pe r spe c t iva ,   s abe r   l e e r   supone   l a
interacción entre el mensaje que imprime el autor, es decir,
el sentido codificado por el escritor en estímulos visuales,
y el significado que el lector puede darle a ese mensaje
(Gephart, 1970, citado por Molina García, 1981: 76). Es
i n d i s p e n s a b l e   q u e   e l   d o c e n t e   t ome   e n   c u e n t a   l a s
actividades fisiológicas e intelectuales –los procesos
c o g n i t i v o s :   a t e n c i ó n ,   p e r c e p c i ó n ,   c omp r e n s i ó n   y
memo r i a - ,   a s í   c omo   e l  ma t e r i a l   l e g i b l e   y   l o s
conocimientos previos del lector.
“La lectura implica el reconocimiento y aprehensión
de símbolos impresos, que se convierten en estímulos –
visuales- para conseguir el significado, con ayuda de las
experiencias pasadas, y, la construcción de nuevos
significados por medio del vocabulario –manejo de
conceptos- que ya tiene el lector. Estos significados se
organizan en procesos mentales de acuerdo con las
necesidades, las expectativas y los propósitos del lector.
Esa organización del pensamiento puede llegar a producir
una nueva, para restituir o reforzar la ya adquirida, tanto
en  lo personal como en lo social” (Tinker y Mc Cullough,
1962, citados por Molina García, 1981:76).
Por estas razones es necesario que el docente
conozca cuáles son los factores que intervienen en el
proceso:
Factores fisiológicos
Percepción visual normal
El estudiante necesita tener una percepción visual
normal. Cualquier falla o dificultad visual entorpece
enormemente la adquisición de la información y a veces
l a   i m p o s i b i l i t a .   C u a n d o   e l   e s t u d i a n t e   t i e n e   u n a
discriminación visual perfecta, es decir, cuando percibe
sin ningún contratiempo las diferencias de forma, de color
y de tamaño, allí esa percepción es normal.
Otro factor importante en el desplazamiento de la
mirada, en el caso del idioma español éste se hace de
izquierda a derecha. Otro es: de qué modo se realizan
los movimientos de los ojos mientras se lee. Para leer,
este movimiento no se realiza de manera regular y
continua, sino más bien a saltos más o menos irregulares.
Un lector ya iniciado parte de la primera frase, da
un salto más o menos grande y luego se detiene. Esta
detención se convierte en la pausa de la fijación, para el
análisis visual de todo aquello que los ojos han visto y
q u e   l e   a s e g u r a   u n a   l e c t u r a   e f e c t i v a .  Un   l e c t o r
experimentado realiza esos desplazamientos de manera
amplia y regular. Al comienzo y al final de la frase esos
desplazamientos son más grandes y con unos saltos
pequeños, pero regulares entre ambos extremos, en
c ambio,  un  l e c tor  nova to  e j e cut a   s a l tos  br eve s  y
numerosos y a menudo irregulares. Algunas veces la
mirada no va de izquierda a derecha y en otras, retrocede.
Percepción auditiva normal
Las dificultades auditivas son más difíciles de
detectar que las visuales. El alerta se refleja por una mala
pronunciación y otras perturbaciones a nivel del lenguaje.
Si no posee una percepción auditiva normal es difícil que
se puedan pronunciar las palabras debidamente. El
docente necesita saber en qué consiste la sordera psíquica.
El alumno puede confundir dos sonidos semejantes –
desde el punto de vista emocional- produciéndole un
desajuste entre el oído y el centro auditivo. Este problema
obstaculiza el aprendizaje de la ortografía.
Ot r a  di f i cul t ad que  puede  pr e s ent a r s e   s egún
Hennerbert –de Bruselas- (citado por Dehant y Gille) es
la perturbación estereofónica, allí la integración de
algunos sonidos durante el aprendizaje se hará de modo
incorrecta y puede agravarse según la emotividad del
estudiante. Los alumnos que no tienen esta dificultad, al
pronunciar la letra v, reciben dos mensajes idénticos: uno
por el oído derecho y otro por el izquierdo y cuando
desembocan en el centro cerebral de la audición coinciden
perfectamente, por eso el sujeto percibe solamente el
sonido v. En cambio, quien tiene la perturbación recibe
dos: v y b.
Factores psicológicos
Conocimiento del cuerpo
Cuando el niño o la niña conoce su cuerpo: sus
movimientos, sus impresiones kinestésicas y cenestésicas,
ese conocimiento le produce bienestar y lo ubica
espacialmente. Esa orientación y estructuración espaciales
lo ubican y lo condicionan para el aprendizaje de la lectura.
Por tal motivo:
“La orientación espacial es una adquisición que
implica dinamismo, desplazamiento; es la posibilidad de
orientarse en una dirección bien determinada del espacio y
de orientar uno o varios objetos según cierta posición... La
estructuración espacial requiere de la disposición global y
de la integración de varios elementos de acuerdo con ciertas
orientaciones bien determinadas” (Dehant y Gille, 1976: 25) 
Ambas intervienen favorablemente en el aprendizaje
en general y de la lectura en particular.
Orientación temporal
El niño o la niña debe tener un claro conocimiento
del tiempo y de su duración para poder expresar con
sucesión cronológica los hechos. Este conocimiento
incide en el aprendizaje de la lengua –sobre todo en la
conjugación de los verbos-, del canto, de la gimnasia y
en la historia.
Sentido del ritmo
El factor rítmico –como sucesión de elementos
sonoros en el tiempo- interviene en el aprendizaje de la
lectura, porque ella también es una sucesión de elementos
sonoros que requiere reproducirse en el orden establecido
por cada una de las lenguas.
Predominio lateral
Son pocos los sujeto en quienes predominan los dos
hemisferios cerebrales. Este predominio abarca ojos,
oídos, manos y pies.
La coordinación sensorio-motriz
La psicomotricidad es donde se conjugan todos los
factores anteriores: esquema corporal, orientación y
estructuración espaciales, sentido del ritmo, entre otros,
pero es en el aprendizaje de la escritura donde juega un
importante papel.
Lenguaje
E l   l e n g u a j e   e s   o t r o   f a c t o r   q u e   d e s e m p e ñ a   u n
e x c e l e n t e   p a p e l   e n   e l   a p r e n d i z a j e   d e   l a   l e c t u r a   y
d e   la e s c r i t u r a .   L a   l e c t u r a   e s   e l   m e j o r   e l e m e n t o
p a r a   l a   c o r r e c c i ó n   d e l   l e n g u a j e   o r a l   p u e s t o   q u e   l a
m a y o r í a   d e   l a s   d i f i c u l t a d e s   q u e   s e   r e p r e s e n t a n   e n
l a   e s c r i t u r a   v i e n e n   d a d a s   p o r   e l   m a l   u s o   d e l
l e n g u a j e   o r a l .
Las relaciones familiares
Estas relaciones deben ser tomadas en cuenta
tanto por los familiares como por los docentes, puesto
que si son efectivas, en esa misma proporción inciden
en el aprendizaje toda vez que esa relación positiva
produc e   s egur idad,   conf i anz a   en  s í  mi smo,   amor,
respeto, comprensión. Aspectos que va a manifestar
en los diferentes momentos de su vida.
Nivel intelectual del niño o de
la niña
C u a n d o   e l   d o c e n t e   e s t á   c o n s c i e n t e   d e   s u
responsabilidad frente al sujeto aprendiente debe, en esa
medida, indagar en qué condiciones se encuentra para
p o d e r   u b i c a r l o   y   a t e n d e r   s u s   n e c e s i d a d e s ,   s u s
expectativas, sus deseos de aprender. En este caso es
necesario conocer:
-Los diferentes tipos de memoria que se deben poner
a trabajar durante la lectura.
-La resistencia que es necesario desplegar contra
algunos factores negativos propios del entorno escolar.
Las dificultades más frecuentes señaladas por Gray
(s.p.i) son: aquellas que atañen a todas las fases de la
lectura, aquellas que se presentan en la lectura mecánica
oral, las relacionadas con la interpretación, las inherentes
a   l a   l e c t u r a   s i l e n c i o s a   y   a q u e l l a s   q u e   i n h i b e n   l a
reproducción minuciosa del material leído. Cualesquiera
de las dificultades observadas, si existen, pueden estar
impregnadas en menor o mayor grado de:
-Inmadurez en los hábitos generales del lenguaje.
-Timidez.
-Poco interés por aprender a leer.
-Inestabilidad y/o fatigabilidad.
-Dificultades de pronunciación.
-Defectos de asociación entre el sonido de la palabra
y su simbología escrita.
Estas dificultades retardan el aprendizaje efectivo
de la lectura. Otros aspectos que pueden influir son:
La sordera parcial.
La desnutrición.
Escasa memoria visual.
Movimientos irregulares de los ojos.
Inmadurez en general. Estos aspectos necesitan la
atención directa de especialistas, en cada uno de los casos.
Conclusiones
En el proceso de lectura es importante que al niño o a
la niña que se inicia se le tome en cuenta la edad mental y
cronológica, y con ambas, planificar las actividades.
Asimismo, el vocabulario debe y necesita ampliarlo y
corregirlo oportunamente el docente para que los niños
logren expresarse con espontaneidad, soltura y propiedad, y
cuando sean adultos, lo puedan usar con libertad y delicadeza.
En cuanto a las competencias, es necesario incluir en
la Educación Básica, los ejes transversales: Lenguaje,
Desarrollo del pensamiento, Trabajo y Valores; esta inclusión
le permitirá el uso adecuado en los estudios superiores, pues
sólo así puede adquirir el conocimiento sin dificultad, pues
la carencia del manejo adecuado de la lectura obstaculiza
en bachillerato y Educación Superior, el logro de aprendizajes
significativos.
El aprendizaje es inseparable de la formación del
pensamiento y del desarrollo del espíritu crítico y creador.
Saber leer es el resultado de un gran esfuerzo, de mucha
dedicación, de mucha educación, educación que no termina
jamás. En este orden de ideas, un educador que entienda
cabalmente el contenido de estas líneas debe tomar con
mucha seriedad la profesión que ha elegido para poder
compaginar su vida con su apostolado y permitirle al sujeto
aprendiente convertirse en un hombre capaz de juzgar.
Bibliografía
Ander Egg, E. (1978). Técnica de investigación social. Bueno Aires, El Cid Editor.
Anderson, A. B. y W.H. Teale (1991). “La lecto-escritura como práctica cultural.” En: Nuevas perspectivas sobre los procesos de lectura y
escritura. México, Siglo Veintiuno editores.
Baez, M. y V. I. Cárdenas. (1999). Segmentación y escritura. Dos estudios sobre adquisición. Rosario – Argentina, Homo Sapiens.
Barquero, R. (1999). Vygotski en el aprendizaje escolar. Argentina, Aique.
Bellenger, L. (1979). Los métodos de la lectura. Tr. Alexandre Ferrer, Oikos-tau. s.a.
Charría de Alonso, M. E. y A. González Gómez. (1993). La producción de textos en un programa de lectura. Bogotá, Procultura –Cerlalc.
________ (1993). El placer de leer en un programa de lectura. Bogotá, Procultura –Cerlalc.
________(1993). Hacía una nueva pedagogía de la lectura. Bogotá, Procultura –Cerlalc.
Czerniewska, P. (1992). Learning about writing. London, Blackwell.
Dehant, A. y A. Gille. (1976). El niño aprende a leer. Tr. de Nelly Sánchez Rodilla. Buenos Aires, Kapelusz.
Ferreiro, E. y A. Teberosky. (1979). Los sistemas de escritura en el desarrollo del niño. México. Siglo XXI.
Goméz, M. E. (1998). Adivinanzas:  un recurso didáctico para la enseñanza del lenguaje. Coro-Falcón. ENDIL-98
Gray, W. (s.p.i). Remedial Cases in Reading.
Goodman, K. (1998). “El proceso de lectura. Consideraciones a través de la lengua y el desarrollo.” En: Lecto-escritura. Lecturas. UPEL. Caracas.
Ministerio de Educación. (1997). Currículo Básico Nacional. Caracas. UCEP.
__________ (1996). Revista de Educación. 121 (Abril, 1966) Caracas-Venezuela.
Molina García, S. (1981). Enseñanza y aprendizaje de la lectura. Madrid, Cepe, s.a.
Padrón Amaré, O. (2000). “En torno al lenguaje y sus significados”. Caracas, Fundalectura. Serie: Documentos Educación y Lectura.
Parcerisa Aran, A. (Dir.) (2000). El constructivismo en la práctica. Barcelona-España, Cotás, S. L.
Piaget, J. (1983). Teorías del aprendizaje. Tr. silvia Furio, Barcelona-España, Crítica, s.a.
Reyes, Y. (1998). Por una escuela que lea y escriba. Ideas para crear y recrear. Bogotá. Colección Los libros del Taller.
Robledo, B. H y A. O. Rodríguez. (1998). Por una escuela que lea y escriba. Ideas para crear y recrear. Bogotá Colección Los libros del Taller.
________ (1998). Por una escuela que lea y escriba. La lectura: nuevos enfoques y concepciones. Bogotá. Colección Los libros del Taller.
Sánchez, B. (1972). Lectura. Buenos Aires, Kapelusz.
Sefchovich, G. (1997). Creatividad para adultos. México, Trillas.
Smith, F. (1983). comprensión de la lectura. México, Trillas.
Torres, C. M. (1999). El juego en el aprendizaje de la Contabilidad en la tercera etapa de la educación básica. Mérida, Talleres Gráficos de la
ULA.
________ (2001). El juego como una estrategia de aprendizaje en el aula. Mimeografiado.
Torres Perdomo, M. E. (1991). Literalidad en la educación básica. Mérida, Consejo de Publicaciones de la ULA.
________ (1993). La candidez de un niño. Mérida, Consejo de Publicaciones de la ULA.

1 comentario: