miércoles, 6 de junio de 2012


Comprensión de textos desde una perspectiva cognitiva: el papel de las 
funciones ejecutivas 
Romina Cartoceti, Bárbara Sampedro y Valeria Abusamra  
Facultad de Filosofía y Letras, Facultad de Psicología, UBA. Unidad de 
Neuropsicología, Hospital Interzonal de Agudos Eva Perón. CONICET 
Buenos Aires, Argentina 
romina.cartoceti@gmail.com  
Introducción  
La comprensión exitosa de un texto requiere de un lector hábil capaz de generar 
un modelo de situación coherente del texto (van Dijk y Kintsch, 1983; Johnson 
Laird, 1983). Para esto, deberá llevar adelante la  doble tarea de procesar y 
mantener en la memoria la información del texto para integrarla con el resto de 
la información proveniente de su conocimiento de mundo y de procesos 
inferenciales. En este sentido, la memoria de trabajo es un componente 
fundamental que puede afectar el proceso de comprensión (Cain, Bryant y 
Oakhill, 2004; Carretti, Cornoldi, De Beni y Romanò, 2005; Gathercole, Alloway, 
Willis y Adams, 2006; Abusamra, Cartoceti, Raiter y Ferreres, 2008). A fin de 
evitar saturar la capacidad mnésica de este almacén temporario, el lector debe 
suprimir aquella información que resulte irrelevante. Al mismo tiempo, deberá 
ser capaz de actualizar, es decir, manipular activamente la información entrante 
para integrarla en una representación mental consistente del texto que se está 
procesando (Carretti, Cornoldi, De Beni y Romanò, 2005). Tanto la supresión de 
información irrelevante (dependiente del control inhibitorio) como el 
mecanismo de actualización (dependiente de la memoria de trabajo) son 
componentes de procesamiento cognitivo regidos por las Funciones Ejecutivas. 
Según Sastre Ribas (2006) estas últimas pueden definirse como un constructo 
que comprende unas habilidades centrales autorreguladoras, que orquestan 
procesos básicos y de dominio específico con el fin de lograr un objetivo 
flexiblemente. En este sentido la comprensión exitosa de un texto depende de la 
indemnidad y el funcionamiento coordinado de estos procesos ejecutivos.  
Objetivo  
Estudiar la influencia de los mecanismos de inhibición y de actualización en la 
comprensión lectora en una población de niños en edad escolar.  50 
Hipótesis 
Los sujetos que tengan un rendimiento bajo en las pruebas de comprensión de 
textos mostrarán también un peor rendimiento en tareas que requieran 
inhibición verbal.  
Los sujetos que tengan un rendimiento bajo en las pruebas de comprensión de 
textos mostrarán también un peor rendimiento en tareas que requieran 
actualización del modelo de situación.  
Metodología  
Participaron alumnos de 5º a 7º grado (N: 716). Fueron evaluados con una 
prueba que mide eficacia lectora (TECLE, Marín y Carrillo, 1999) y dos pruebas 
de comprensión de textos. Sobre la base de los resultados obtenidos en las 
últimas, fueron divididos en dos grupos experimentales de buenos y malos 
comprendedores (N: 86). Cada grupo llevó a cabo una serie de pruebas que 
miden la capacidad de inhibición verbal (Test de Hayling), de actualización del 
modelo de situación y funciones ejecutivas (Test de Stroop)  
Resultados y Discusión 
Se llevaron a cabo estudios de análisis estadístico y los resultados hallados 
confirman las hipótesis planteadas. 
Un rendimiento empobrecido en la tarea de comprensión de textos correlacionó 
con una mayor cantidad de errores de intrusión en la parte B del test de 
Hayling, menor cantidad de aciertos en las tres partes del test de Stroop (siendo 
el rendimiento en la parte C el que presenta diferencias más notorias) y un 
mayor número de errores de perseveración en la tarea de actualización. 


Eficacia lectora y memoria de trabajo: ¿dos herramientas imprescindibles en 
la comprensión de textos? 
Claudia Mabel Sánchez 
Universidad de Buenos Aires 
Buenos Aires, Argentina  
claudiasanchez22@hotmail.com 
Leer y comprender un texto para mayoría de los niños son habilidades 
correlativas.  
Sin embargo, en algunos niños pueden observarse las dos habilidades 
disociadas y déficits específicos en la comprensión y en la precisión de lectura 
(Pimperton y Nation, 2010). 
Definida en su sentido más ecológico y funcional la lectura es la capacidad de 
utilizar el lenguaje escrito para acceder a la información contenida en un texto 
(Ferreres, Abusamra, Casajús, China, 2010). Por lo tanto, el objetivo último de la 
lectura es la comprensión, proceso complejo en el que intervienen componentes 
lingüísticos, psicolingüísticos, culturales y conocimientos de mundo propios del 
sujeto. 
Desde un punto de vista cognitivo, la distinción entre decodificación y 
comprensión permite contrastar los procesos de bajo nivel característicos de la 
decodificación (más modulares y automáticos, y con bajo consumo de recursos) 
con los procesos de alto nivel típicamente implicados en la comprensión de 
textos (procesos no modulares, no automáticos, con alto consumo de recursos) 
(Abusamra, 2010). 
Leer se presenta entonces como una habilidad necesaria para la comprensión, 
aunque no suficiente, ya que en cada una de ellas intervienen factores 
cognitivos subyacentes diferentes.  
La memoria de trabajo, por su parte, juega un rol fundamental en la 
comprensión de un texto, ya que para comprender es  necesario procesar y 
sostener la información a fin de generar un modelo de situación coherente con 


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